Milán es la capital del mercado bursátil de Italia y centro de negocios. Una ciudad elegante que día a día se afianza como dentro de diseño mundial compitiendo con París para convertirse en la catedral de la moda. Los aficionados a la moda, concurren a Milán dos veces al año para conocer y disfrutar de las últimas tendencias.
Milán tuvo un gran desarrollo en tiempos de la Revolución Industrial del siglo XIX , hasta que en el siglo XX llegó a se la ciudad más próspera de Italia. Milán es la unica ciudad que ha logrado integrarse totalmente a las capitales industriales, culturales, industriales y financieras de Europa. Su centro medieval es una puerta al pasado y realmente es inevitable dejar de maravillarse con su impresionante Catedral ubicada en la Plaza del Duomo. Sus galerías de arte son visitadas a diario por miles de turistas, como así también la casa de la Opera de La Scala y el convento de la iglesia de Santa María delle Grazie donde se puede apreciar el fresco de Leonardo Da Vinci, La Ultima Cena.
Una ciudad que conjuga la historia y la modernidad y donde las opciones son variadas en todos los ámbitos. Durante el día ofrece diferentes recorridos para participar de su historia y su cultura, pasando por las mejores tiendas de importantes diseñadores italianos, mientras que por las noches pone a mano de los visitantes las mejores discotecas, pubs y restaurantes de la ciudad de Milán.